| ||||
nunca se lo había contado a nadie, nos autorizó a que la citáramos, como sigue: «Tengo veintiocho años, y un año y seis meses de casada; no tengo hijos.... Mi esposo me golpea.... Ya he hablado con él. Le dije que no quería que me hablara con malas palabras y que no permitiría que me volviera a golpear (él piensa que sólo así es como me calmo).... Yo he aprendido a recibir el golpe y no continuar la discusión, ya que cuando lo hice, me fue muy mal y muchas cosas rompimos en casa: parecía guerra... Me da mucho coraje, porque durmió tan tranquilo y se despertó tan tranquilo que me pregunto: ¿por qué no se siente mal por lo que me hace? »Yo soy una mujer preparada profesionalmente. No fallo en mis labores de la casa, no soy fiestera ni alcohólica, y no siento que me merezca este trato. ¿Qué hago?... Él siempre dice que yo todo lo provoco, que él no hace ni dice nada. ¿Cómo le hago para armarme de valor e irme? ¿Cómo enfrento a la sociedad?» Este es el consejo que le dimos: «Estimada amiga: »Nos alivia mucho que usted ya esté consciente de que necesita dejar a su esposo en seguida. ¡Su vida pudiera correr peligro! Un hombre que golpea a su esposa y luego dice y cree que se justifica su conducta es un hombre del que se debe huir tan pronto como sea posible. »¿Cómo puede usted armarse de valor y dejarlo? ¿Por qué no hace una búsqueda en Internet de historias de todas esas mujeres como usted que se han quedado con un hombre violento que finalmente las mató en un ataque de furia? O haga una búsqueda de casos de mujeres con ojos amoratados y brazos quebrados que vuelven vez tras vez a sus agresores. Por lo general, los hombres dicen que quieren cambiar y que no volverán a golpearlas; en cambio, el esposo suyo ni siquiera se disculpa por haberla maltratado. ¡Con razón que la enoje tanto que él duerma como si nada después de golpearla a usted! Debe enojarla al extremo de que decida consultar a un abogado de inmediato para informarse de los derechos que le corresponden. Haga lo que le diga el abogado. En algunos países, se puede obtener en una estación de policía una orden judicial que prohíbe que un esposo violento se le acerque a la esposa. Le rogamos que no deje que pase un solo día antes de hacer lo necesario para su seguridad. »Menos mal que usted no tiene hijos con ese hombre. ¿Acaso habrá mujer alguna que quisiera que sus hijos crecieran con semejante padre? Usted no debe avergonzarse de decirles a su familia y a sus amigos que lo está dejando porque la golpea. Es él quien debiera avergonzarse y no usted. »No será fácil, pero usted puede dejarlo, »Linda y Carlos Rey.» Pide ayuda a las autoridades de tú Ciudad, busca una Iglesia Cristiana de Sana Doctrina, busca consejería pronto. Ora a Dios para que te libre de ese Canalla, huye, tú no te mereces ese trato, deja a ese" Hombre". Jesucristo desea ser nuestro Salvador. Él es el Creador, y sabe cuál es nuestro mal y qué necesitamos para vivir en paz. Invitémoslo a que sea nuestro Salvador. Entreguémosle nuestra vida y sometámonos a su divina voluntad. Él nos ama intensamente y tiene la gracia y el poder para sanarnos de ese mal espiritual que nos agobia. Cristo quiere ser nuestro Salvador. Ya no busquemos más. Aceptemos su diagnóstico y la ayuda sobrenatural que nos ofrece. http://cvclavoz.com/e-total/pegame-pero-no-me-dejes/ |
sábado, 13 de julio de 2013
NO HAY DERECHO A SER GOLPEADO Y MALTRATADO: HUYE DE ESE HOMBRE MALVADO: AUXILIO, SOCORRO , PIDE AYUDA HOY MISMO POR FAVOR:! TÚ VIDA ESTÁ EN PELIGRO!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario